En medio de la tensión internacional generada por los aranceles a las importaciones de acero y sus derivados, la Cámara Argentina del Acero (CAA), hizo un fuerte reclamo al presidente electo Javier Milei para que negocie directamente con Estados Unidos y busque una solución al conflicto.
La medida, anunciada por el presidente Donald Trump el pasado lunes, impone un arancel adicional del 25% sobre todos los productos de acero que ingresen a su país, incluyendo a los provenientes de Argentina.
La CAA reconoció la necesidad de medidas de defensa frente a la competencia desleal, en particular debido al avance de China como principal productor de acero del mundo. Sin embargo, desde el sector, destacaron que la respuesta debe ser coordinada y basada en un diálogo constructivo entre ambas naciones. “La respuesta debe ser estratégica y fundamentada en la relación geopolítica que Estados Unidos tiene con Argentina”, indicaron en un comunicado oficial.
La decisión de Trump, que forma parte de una estrategia para reducir el déficit comercial de Estados Unidos, no distingue entre los países exportadores, afectando a todos sin excepción. Aunque el presidente republicano descartó una posible excepción para Argentina, señalando que el déficit con nuestro país es pequeño, la CAA subrayó que Argentina representa solo el 0,20% de la producción mundial de acero, y que, históricamente, ha sido un proveedor confiable para el mercado estadounidense.
De hecho, según los datos de la CAA, la industria siderúrgica argentina tiene una integración productiva con Estados Unidos, que solicita productos de acero como insumos para su propia producción. Esta relación fue incluso formalizada en 2018, cuando Trump implementó aranceles del 25%, y durante ese año, Argentina logró un acuerdo para exportar hasta 180.000 toneladas de acero anualmente, volumen que ha sido respetado rigurosamente desde entonces.
A pesar de estos acuerdos, el creciente poderío de China en el mercado global de acero es una de las principales preocupaciones. Con una participación del 54% en la producción de acero y más del 51% en productos terminados, China se ha consolidado como el principal exportador de acero en el mundo, con más de 94 millones de toneladas enviadas al exterior solo en 2023.
Por otro lado, la CAA rechazó el argumento de Trump sobre el déficit comercial con Argentina, recordando que este solo se revirtió en 2024, tras años de profunda recesión que limitó drásticamente las importaciones. Además, destacaron que el aumento de las exportaciones argentinas a Estados Unidos en los últimos meses se debió al envío de productos energéticos solicitados por el país norteamericano.
En este contexto, la Cámara Argentina del Acero hizo un llamado urgente a Javier Milei para que busque un “canal de diálogo” con la administración de Trump, con el objetivo de revertir la medida y permitir que ambos países sigan profundizando su relación productiva en el sector siderúrgico, beneficiando a las economías, trabajadores y la cadena de valor del acero de manera mutua.
La urgencia de este acuerdo se hace más evidente, ya que, si no se alcanza un entendimiento antes del 12 de marzo, todas las importaciones de acero estarán sujetas al arancel adicional del 25%, lo que podría tener graves repercusiones para el comercio internacional del acero.