Un incendio forestal estalló en la reserva natural de Sierra de los Padres, cerca de Mar del Plata, dejando a su paso una devastación que afectó entre siete y ocho hectáreas de terreno.
El fuego, cuyo epicentro se localizó en las inmediaciones del predio recreativo del Sindicato de Empleados de Comercio (SEC), desató evacuaciones preventivas, principalmente en campamentos de la zona, en el partido de General Pueyrredón.
El incendio, aún activo durante la tarde, desencadenó una respuesta masiva por parte de los bomberos de la región, quienes luchaban incansablemente para contener las llamas. La situación requería un esfuerzo coordinado, con personal de Bomberos Voluntarios, maquinaria de la Delegación municipal y colaboradores de Defensa Civil, quienes trabajaban arduamente para contener el avance del fuego.
Ante la magnitud del desastre, se solicitó la asistencia de los Bomberos Mar del Plata para reforzar las labores de extinción. Rodrigo Goncalves, secretario de Seguridad de General Pueyrredón, destacó la importancia de las evacuaciones preventivas como medida de precaución ante la gravedad del incendio.
La comunidad de la región se mantenía en alerta mientras observaba cómo el incendio consumía parte de la preciada reserva natural. La incertidumbre se palpaba en el aire, pero el esfuerzo conjunto de los equipos de emergencia y el apoyo de la población brindaban un rayo de esperanza en medio de la tragedia.
El incendio forestal en Sierra de los Padres servía como un recordatorio urgente de la fragilidad de nuestros ecosistemas naturales y la necesidad de protegerlos y preservarlos. Mientras los bomberos continuaban su batalla contra las llamas, la comunidad se unía en solidaridad y esperanza, esperando que el daño causado por el fuego pudiera ser contenido y mitigado lo antes posible.
