Entrevista a Ricardo Manetti, decano de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires.
En diálogo con el programa “En el día a día”, por Radio República AM 770, Ricardo Manetti, decano de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires (UBA), compartió su perspectiva sobre la complicada situación presupuestaria y salarial que enfrenta la institución.
Manetti recordó que en febrero se declaró la emergencia presupuestaria en una sesión extraordinaria del Consejo Superior de la UBA. La falta de un presupuesto para el año 2024 planteaba serias dificultades para el inicio de las clases y el mantenimiento de las operaciones básicas de la Facultad, como la limpieza y las reparaciones de infraestructura.
“A pesar de estas dificultades, logramos mantener el primer cuatrimestre gracias a un plan de lucha significativo, que incluyó clases públicas, días de paro y una marcha nacional el 23 de abril”, relató Manetti. Sin embargo, resaltó que la respuesta del Gobierno no fue inmediata ni suficiente, ya que los fondos prometidos “aún no han llegado a muchas universidades”.
Ricardo Manetti asumió como decano de la Facultad de Filosofía y Letras en agosto de 2022.
En esta nota de Página/12 se traza un perfil de su trayectoria.
La emergencia salarial y la pérdida del poder adquisitivo
La situación salarial es igualmente crítica. “Hay una pérdida real del 40% del salario de los trabajadores, tanto docentes como no docentes,” enfatizó Manetti. Esta pérdida ha llevado a la UBA a declarar una emergencia salarial. La incertidumbre sobre el comienzo del segundo cuatrimestre es alta, ya que sin los trabajadores y trabajadoras, el funcionamiento de la universidad es imposible.
“La situación es muy compleja y no sabemos qué va a pasar en el segundo cuatrimestre”
Ricardo Manetti
Manetti también habló sobre el contexto presupuestario general del país, señalando que las universidades están trabajando con números desactualizados de finales de 2022. “La desactualización en términos inflacionarios es clara,” afirmó. Además, expresó su preocupación por la discusión del presupuesto 2025, destacando que la reconstrucción de un sistema destruido toma mucho tiempo.
El decano criticó al gobierno actual por su falta de interés en la educación vinculada a las universidades públicas y su falta de apoyo a la gratuidad y el sentido crítico de estas instituciones. También mencionó el “cinismo institucional” que señala situaciones resueltas cuando en realidad no lo están.
Impacto en la comunidad universitaria
La crisis no solo afecta a la infraestructura y los salarios, sino también a los estudiantes. Manetti compartió casos de estudiantes en situación de calle que no pueden pagar su vivienda pero siguen cursando sus materias. “Es una situación terrible,” dijo.
Otro tema abordado fue la falta de un boleto educativo en la Ciudad de Buenos Aires. Manetti destacó la paradoja de que muchas facultades de la UBA están bien comunicadas por la red de subte, pero aún así, “no hay políticas adecuadas que faciliten el transporte para estudiantes y docentes”.
La lucha continúa
Finalmente, Manetti informó que las gremiales docentes y no docentes están trabajando con las bases para la posibilidad de no comenzar las clases en el segundo cuatrimestre si no se logra una recomposición salarial. Además, se está planificando una nueva movilización para finales de agosto o principios de septiembre.
“Hasta la primera mitad del año funcionamos como pudimos”
“Esta situación no es solo una cuestión económica o financiera, sino una decisión política e ideológica,” concluyó Manetti. “Este gobierno no está dando respuesta a nuestras demandas porque no le interesa el espacio de nuestras universidades públicas ni la educación superior.”
La incertidumbre sobre el futuro inmediato de la UBA y otras universidades nacionales sigue siendo alta, y la comunidad educativa continúa luchando por una solución que garantice el funcionamiento adecuado y la dignidad de sus trabajadores.