Los desafíos de la democracia: miedos y esperanzas a 41 años de su recuperación

Este 10 de diciembre, mientras se cumple el primer año del gobierno de Javier Milei, Argentina celebra también los 41 años de democracia ininterrumpida. Entrevista con el economista Martín Hourest, quien participará de un encuentro para reflexionar sobre el tema, en un panel muy plural que se dará cita en la Facultad de Farmacia y Bioquímica de la UBA.

Esta tarde se llevará a cabo en la Facultad de Farmacia y Bioquímica de la Universidad de Buenos Aires un encuentro titulado “Los miedos y las esperanzas en las democracias que vienen”. Organizado por el Laboratorio de Políticas Públicas y la Fundación Sergio Karakachoff, con el apoyo de la Fundación Friedrich Ebert, el evento contará con un panel diverso integrado por figuras como Claudia Piñeiro, Roberto Gargarella, Lorena Álvarez, Federico Torani, Ana Wortman, Daniel Arroyo y el economista Martín Hourest, quien reflexionó en una entrevista en Radio República AM 770 sobre los retos de la democracia en Argentina.

Hourest señaló que la democracia en Argentina nació con una consigna clara: “Por la democracia se come, se educa, se cura”. Sin embargo, reconoció que, aunque hubo avances, persiste una deuda estructural. “La construcción de una sociedad igualitaria, sin crueldad ni opresión, ha fracasado”, afirmó. Según el economista, este fracaso ha permitido el ascenso de un gobierno de derecha que, lejos de resolver los problemas sociales, está profundizando las desigualdades con políticas que agravan la situación.

“Si la sociedad de diciembre de 2023 era doliente y sufriente, con altos niveles de pobreza infantil, la que dejará este gobierno será aún más grave y con problemas estructurales consolidados”, advirtió.

Una sociedad sin visión común

Para Hourest, uno de los principales desafíos es recuperar una visión común de sociedad. “La impresión es que, si no logramos reconstruir un espacio de diálogo, estaremos frente a una guerra de todos contra todos. Es necesario discutir las necesidades elementales. No hay debate democrático posible cuando la gente no tiene qué comer, dónde vivir o cómo acceder a la salud”, destacó.

En este sentido, hizo un llamado a construir políticas que atiendan tanto la ciudadanía política como la social, señalando que estas deben surgir de un entendimiento colectivo de la realidad. “La melancolía política es reaccionaria. El futuro de la Argentina no está en volver a las décadas pasadas, sino en proyectarnos hacia el 2030 y 2035”, enfatizó.

El papel del Estado y del mercado

En cuanto al rol del Estado y el mercado, Hourest planteó una crítica contundente. “Fracasaron ambos. Nunca el gasto público fue tan alto, y nunca la gente estuvo tan descontenta con el Estado. Al mismo tiempo, las privatizaciones más salvajes no trajeron los resultados esperados”, sostuvo. Según el economista, es imprescindible encontrar una forma de coexistencia entre democracia y poder económico que promueva la prosperidad sin subordinaciones.

El impacto de las redes sociales

Consultado sobre las nuevas generaciones y el impacto de la tecnología en las relaciones sociales y políticas, Hourest fue tajante: “La tecnología no suple ni beneficia, en este contexto, la capacidad de diálogo social. Hemos perdido la habilidad de entender que quien está al lado no es un enemigo”. Según su visión, las redes sociales, lejos de conectar personas, tienden a aislarlas al priorizar la interacción con información fragmentada.

Un espacio para debatir el futuro

El evento de esta tarde, que comenzará a las 17:30 horas, busca justamente generar un espacio para pensar en nuevos sentidos comunes y debatir cómo enfrentar los desafíos de la democracia en Argentina. “La disputa hoy está entre el miedo y la esperanza”, resumió Hourest.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *