Luego de la reunión de Alberto Fernández con Xi Jinping, donde se conoció la decisión de China de ampliar el Swap, Argentina pasa a rener unos 10 mil millones de reservas líquidas.
Por Pablo Mercau
El ministro de Economía, Sergio Massa, destacó “la duplicación de las reservas de libre disponibilidad para el Banco Central, que pasa de tener 5.000 millones, producto de la recaudación del dólar soja; a U$S 10.000 millones, y de la liberación de parte del ‘swap’ en el acuerdo con China”.
Esto fue parte de los resultados de la reunión bilateral que Alberto Fernández mantuvo con su par Xi Jinping en el marco de la Cumbre del G-20 en Indonesia.
En Madrid, donde tiene lugar la última etapa del viaje de la comitiva presidencial, tras el paso por Francia y por Indonesia, Massa dijo que Argentina tiene ahora “disponibles, para trabajar en el mercado único libre de cambios, U$S 10.000″ millones.
Hasta ahora, de los U$S 18 mil millones del ‘swap’ chino, se permitían usar U$S 473 millones cada 90 días, con lo cual, merced a este acuerdo alcanzado el martes último, pasaron a ser U$S 5.000 millones hasta julio del año que viene, y renovable”.
La operación del ‘swap’ fue una excepción que hizo China porque la Argentina fue de los primeros que firmó la denominada Ruta de la Seda.
Massa explicó que “esto, además, a los sectores productivos de la Argentina les resulta muy importante, porque les permiten acceder más rápido al flujo de dólares para lo que son insumos y bienes intermedios importados para la producción en la Argentina”.
Desarrollo y soberanía energética, los ejes del Congreso de Energía
En Bali también tuvo lugar el encuentro del Presidente y sus funcionarios con la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, sobre lo cual Massa dijo que fue importante “haber dejado ya abierta la discusión sobre el precio de la guerra” con ese organismo multilateral de crédito, “y ya establecido que en diciembre se van a discutir los sobrecargos”, señaló Massa.
El ministro, que siguió a la distancia la aprobación en el Senado del Presupuesto 2023, planteó que la Argentina “le está pagando al FMI el doble de tasa de interés que, por ejemplo, le paga al Banco Interamericano de Desarrollo (BID)”, y consideró que eso resulta “absurdo cuando el prestamista, en última instancia, es el Fondo”.
La Argentina le paga 6,6% en intereses al FMI, el 5% al Banco Mundial, el 3,9% al Club de París y el 2,9% al BID.
En cuanto al impacto de la guerra, la Argentina le dejó al FMI un informe y “la discusión de la prospectiva de 2023 será en diciembre”, indicó Massa, después del cierre del tercer trimestre, cuando se discuta un informe del equipo técnico.
En este sentido, Massa indicó que, en diciembre próximo, el board del FMI “trabajará por bloques”. En el caso de Europa -detalló el ministro- se discutirá el conflicto bélico “porque un país en guerra como Ucrania presta al absurdo que está pagando sobrecargos”.
El tercer punto discutido con Georgieva fue que el FMI no computara como déficit los montos que hizo la Argentina como contrapartida a préstamos del Banco Mundial (BM), por 230 mil millones de pesos, y que ese total lo ponga el propio BM.
También se habló en la reunión con Xi Jinping de la construcción de represas en el país con inversión china, con el compromiso por parte de ese país de U$S 500 millones, desglosados en U$S 223 millones que puso la Argentina más U$S 277 millones de anticipo.
Las obras contemplan la llamada “Amba 1”, una obra eléctrica en el Gran Buenos Aires por U$S 500 millones, y la red de gasoductos accesorios al troncal de la represa Néstor Kirchner, por $1.900 millones.